lunes, 30 de diciembre de 2013

Besitos matinales

Y yo me pregunto... por qué será que a los hombres les resulta tan difícil mostrarse cariñosos sea cual sea el tipo de relación que mantienen con una mujer? Si ya sabemos cuando os estais pillando, no es necesario que lo disimuléis.

Por qué les cuesta tanto decirnos qué guapa estás y en cambio les cuesta tan poco decírselo a nuestras amigas?

Por qué les dan tanta importancia a los preliminares y tan poquísima a los posteriores?

Por qué esa manía después de una noche maravillosa, o buena, cuanto menos, de ponerse a dormir en el otro extremo de la cama, cuando es sabido y consabido la falta que nos hacen (a la mayoría) los mimitos y los abrazos?

Por qué ese distanciamiento la mañana siguiente, aunque durante la noche se hayan compartido un millón de cosas (no hablo sólo de sexo)?

Por qué no se les ocurre que aunque la relación no conlleve amor y sea incluso solamente esporádica, esa ternura nos es necesaria para hacernos sentir bien?

En resumen, por qué no nos dan los buenos días con dulces y cariñosos besitos en lugar de ese "quieres un café?", mientras nos miran con miedo a ver si nuestro aspecto va a ser tan terrible como esperan.

Definitivamente reivindico los besitos matinales, los dulces despertares, los abrazos nocturnos, las caricias imprevistas, las miradas tiernas, los abrazos por la calle, que nos cojan de la mano y que nos hagan creer que en algún momento somos la única, porque no nos basta, como dice mi amigo Sabina, aquello de "de sobras sabes que eres la primera", que hace falta oirlo de vez en cuando (aunque vayamos de duras y digamos que no necesitamos eso).

Y conste que no soy romántica, pero que a nadie le amarga un dulce, hombre!!!!!!!!!!!!!

He dicho.

Anastasia ©

09.07.2007

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